Ingredientes (para unos 12 muffins):
-200g de calabaza aproximadamente
-50g de mantequilla
-50g de azúcar moreno
-50g de azúcar
-2 huevos
-50g de queso crema (podéis sustituirlo por 25g más de mantequilla)
-2 cucharaditas de canela
-1/2 cucharadita de jengibre
-1/4 cucharadita de nuez moscada
-1 pizca de pimienta negra
-175g de harina
-2 cucharaditas de levadura química
-1/2 cucharadita de sal
-3 cucharadas de cacao en polvo sin azúcar
-75ml de buttermilk (o lo que es lo mismo: 75ml de leche con una cucharadita de vinagre, que es lo que yo puse. Si lo hacéis así, preparadlo antes de empezar con la receta, porque debe reposar unos 10 minutos antes de ser utilizado. Tendrá aspecto de leche cortada).
-150g de chocolate negro (100g en trocitos, 50g para derretir)
Preparación:
-Antes de nada, pelamos la calabaza, la cortamos en trozos, y la ponemos a cocer en agua durante unos 30 minutos, o hasta que esté blandita. Escurrimos bien, aplastamos con un tenedor y reservamos.
-Derretimos también 50g de chocolate negro al baño María (o al microondas) y reservamos.
-Troceamos los 100g de chocolate restantes, y reservamos (si hace mucho calor en la nevera).
-En un cuenco ponemos la mantequilla, a temperatura ambiente, junto con los dos tipos de azúcar y batimos hasta que la mezcla esté espumosa.
-Añadimos a la mezcla anterior los huevos, que también tienen que estar a temperatura ambiente, uno a uno; es decir, cuando el primero esté integrado, añadimos el segundo, y batimos de nuevo hasta que quede una mezcla bastante blanquecina.
-Añadimos entonces el queso crema, y batimos de nuevo hasta que no haya grumos.
-Añadimos la canela, el jengibre, la nuez moscada y la pimienta negra, y batimos hasta que tenga un color homogéneo.
-Añadimos entonces la calabaza aplastada que habíamos reservado, y batimos hasta que esté incorporada.
-Tamizamos la harina, junto con la levadura, la sal y el cacao en polvo, y la integramos sin batir demasiado.
-Añadimos también el buttermilk, y mezclamos.
-Por último añadimos el chocolate derretido que teníamos reservado. Pasamos el chocolate troceado, que teníamos reservado también, por harina (para que no se hunda) y lo añadimos también con movimientos envolventes.
-Preparamos unos papelitos para magdalenas en algún soporte que permita que conserven la forma, y los rellenamos hasta 3/4 partes de su capacidad con la masa.
-Metemos los muffins en el horno precalentado a 180º durante unos 25 minutos, o hasta que al introducir la punta de un cuchillo en ellos salga limpio de masa.
-Dejamos enfriar en una rejilla, ¡y a disfrutar!
Os dejo algunas fotos de mis días de vacaciones... ¡ya os pondré más en próximas entradas!
Y si probáis los muffins (que espero que sí)... ¡qué aproveche!